Tips para lucir una sonrisa cada vez más blanca y saludable
Te Cepillas los dientes tres veces al día? ¿Usas hilo dental y visitas regularmente el dentista? Si la respuesta es positiva, ya estás haciendo mucho por tu salud bucal. Por lo general, menos de la mitad de los adultos tiene una rutina de higiene oral aceptable. Estudios realizados a lo largo de los últimos años han demostrado que pocas personas tienen una rutina de limpieza de los dientes, y más de la mitad no sabe exactamente cuál es la mejor forma de cuidar de las piezas dentales.
Los cuidados con la boca nunca están de más y por esto te pasamos algunos:
- El uso de cepillos interdentales, hilo o cinta adhesiva al menos una vez al día ayudará a eliminar la placa y los restos de alimentos entre los dientes, donde el cepillo no llega.
- El uso de un enjuague bucal también es muy importante para la higiene, ya que contiene un ingrediente antibacterial para reducir la placa y prevenir enfermedades de las encías
- Debemos cepillar los dientes con movimientos suaves circulares o de barrido abarcando tanto los dientes como el tejido gingival, esencial para mantener sana la encía.
- La lengua es donde más tenemos almacenadas bacterias que producen mal aliento, por ello no debemos olvidarla y cepillarla con movimientos de adentro hacia afuera.
- No forzar las encías con el cepillo. Existe un mito relacionado con las encías que afirma que si sangran no hay problema. ¡Esto es mentira! En caso de que sangren las encías al limpiarlas lo ideal es acudir al dentista para comprobar que no estamos padeciendo ningún problema grave.
- El agua para cepillarse no debe ser fría ni caliente. El contraste de temperaturas puede dañar de forma considerable la salud bucal: tanto el frío como el calor extremo provocan contracción y dilatación de los dientes, produciendo fisuras en la superficie del esmalte y aumentando la sensibilidad de las piezas dentales. Es por eso que debemos lavar nuestros dientes sencillamente con agua tibia.
- Jamás compartir el cepillo de dientes. Utilizar el cepillo de otra persona es un acto sumamente riesgoso y un grave foco de contagio de infecciones. Si en algún momento te olvidas el cepillo dental, lo mejor es hacer buches higiénicos. ¡Nunca te limpies con un cepillo ajeno!